Cambian las reglas del juego en la distribución de medicamentos

182

La pandemia por COVID-19 supuso un reto mayúsculo para todos los países en diversos ámbitos: social, empresarial y económico, pero además trajo consigo desafíos para aquellas industrias orientadas a la producción alimentos, bebidas y distribución de farmacéuticos.

En México, habrá modificaciones en este ámbito, luego de que la Oficina de Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), responsable de la compra de medicinas para el sector salud, informara que el abasto de medicamentos correspondiente a este año comenzará en mayo, y no en abril, como se había anunciado, previamente, con el objetivo de cumplir con los tiempos de fabricación y entrega de los proveedores.

Esto, luego de que se dieran a conocer las bases de la licitación pública sobre 1,600 claves de medicamentos, las cuales se dieron a conocer el 4 de diciembre pasado; sin embargo, el sistema nacional de salud es sobre 2,037 claves, equivalentes a 2,000 millones de piezas, con un valor superior a 100 mil millones de pesos, según el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi). Esto, sumado al anuncio del gobierno federal que permite a gobernadores y empresarios adquirir vacunas COVID-19, siempre y cuando exista una solicitud de compra.

El acuerdo de la UNOPS y el gobierno federal también incluye medicinas de “abasto crítico”, las cuales deben estar disponibles a partir de este mes en las instituciones públicas de salud. Esto no es un reto mayor, si se toma en cuenta la importancia de tener acceso a los medicamentos para preservar la salud de la población, en especial luego de un escenario tan adverso como ha supuesto la pandemia por la propagación del virus SARS-CoV-2.

Resulta fundamental que las empresas dedicadas a la fabricación, pero sobre todo a la distribución de fármacos, reciban consultoría estratégica para operar flotas que, junto con las plataformas tecnológicas indicadas, respondan a sus necesidades y que así puedan lograr excelentes resultados.

En este sentido, Element Fleet México ha pronosticado que a raíz de la pandemia, las empresas tuvieron que adaptarse rápidamente y deberán seguir haciéndolo para poder mover los productos de los centros de distribución a los puntos de entrega, lo que abarca la reconfiguración de la flota, adaptación de unidades.

Por ello será importante la necesidad de que las empresas cuenten con planes que les permitan tener una logística óptima, con el fin de cumplir con los tiempos de entrega de los productos y el acceso del consumidor a los mismos, en especial ahora que el comercio electrónico ha llegado para quedarse, incentivado por la pandemia, lo que trae consigo más retos y aspectos a considerar para cumplir con este propósito.

A pesar de la drástica baja en la venta de vehículos durante 2020, debido a estas circunstancias, las armadoras han hecho esfuerzos significativos para retomar el ritmo. En diciembre, la venta de flotas mostró una recuperación en algunos estados, producto de la reactivación económica, con respecto a igual mes de 2019, de acuerdo con cifras de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).

Esto ha sido motivado por el comercio electrónico, y seguirá así debido al traslado de medicamentos y vacunas. Perspectivas de Element Fleet México señalan que el retail seguirá en un continuo proceso de transformación, dado que muchos comercios siguen cerrados y esto se trasladará al comercio electrónico.

En el caso de la distribución de medicinas, este acuerdo entre la UNOPS y el gobierno federal trae sin duda un área de oportunidad significativa para demostrar la eficiencia de la industria y también, por qué no decirlo, su importancia para la economía y sociedad, es decir, demostrar que tiene el músculo para poder cumplir con este reto.

Comments
Loading...